sábado, 28 de agosto de 2010

Ruta y cena en la Pizzeria AVANTI (Lago Cala'n Bosch)

Buena ruta la de esta tarde de Sábado que discurrió por bellos parajes y concurridas carreteras, como era previsible en plena temporada turística. Nos desplazamos en nuestras motos hasta Ciutadella y una vez allí pasamos una velada muy agradable cenando en la Pizzería AVANTI, en el Lago de Cala'n Bosch.

lunes, 2 de agosto de 2010

19º HOG Rally Lugano - Alpes Suizos - Selva Negra

Llegó el ansiado día de nuestro viaje, el 15 de Julio, zarpamos del puerto de Ciutadella y tras una travesía bastante movidita llegamos a Barcelona. Sin perdida de tiempo nos dirigimos a La Jonquera, y ya en Francia pasamos esta primera noche en Montpellier en el Hotel Le Mejean**, tuvimos suerte de que nos dieran cena ya que a las 21:30 se iba el chef, no es como en España que la gente cena tardísimo; la camarera fue muy simpática, descendía de abuelo andaluz, concretamente de Córdoba y había heredado la frescura y la gracia del sur, después de la cena a dormir.

A las 7:00 de la mañana nos pusimos en marcha, teníamos muchas horas de autopista por delante y era mejor hacerlas sin calor y con tranquilidad, dejamos atrás Nimes, Aix-en- Provence, Nice, Genova, Milano, Como… por la tarde llegamos a Lugano y nos instalamos en el camping del HOG en Campione d’Italia.
Tras mil cincuenta kilómetros de conducción, el destino final no nos defraudó en absoluto.

El hermoso lago suizo de Lugano fue el escenario perfecto para la celebración de la 19º edición del European H.O.G. Rally de este año 2010, y los Swiss Harley Days.
El núcleo en torno al cual se centraron todas las celebraciones, se situó en La Piazza de lla Riforma.


En el escenario principal sonó música en directo durante todo el evento, los puestos de venta fueron un auténtico paraíso para los aficionados a las compras, que encontraron artículos Harley-Davidson, puestos de chucherías y comida, y vendedores de accesorios para motos, los bares y restaurantes de la zona estaban llenos de gente y de aficionados Harley, que aprovecharon para relajarse bajo el sol suizo. Dicen que asistieron al evento 60.000 visitantes y 15.000 motocicletas y entre ellos estábamos nosotros, se puede decir que la ciudad estaba tomada por las motos, eso sí en un ambiente totalmente festivo; ha sido una experiencia inolvidable.

El domingo por la mañana nos despedimos de Lugano y marchamos decididos a coronar los míticos pasos alpinos, el primero fue el San Gottardo 2.091m. no está mal para ir abriendo boca.

Seguimos hacia el Furkapass 2.436m., es un puerto con mucho carácter, de aquellos que tienen historia y la palpas en cada rincón. Paramos para contemplar y entrar en el Glaciar del Ródano y la gruta de hielo, en un souvenir hicimos algunas compras y una extraña excitación se apoderó de nosotros, digo yo que sería algún raro mal de altura.




Nuestro siguiente objetivo: el Grimselpass 2.165m. un puerto bien asfaltado, con unas vistas preciosas y una carretera sinuosa que te invita a saborearla en cada curva, ya en la cima nos encontramos con unos peculiares moteros. Durante la bajada contemplamos ríos, cascadas naturales, prados verdes, embalses… Simplemente la grandeza de los Alpes en estado puro.




Después de cruzar los valles y pueblos suizos nos dirigimos hacia Selva Negra.
Cruzamos la frontera hacia Alemania por Baden y después de cenar en un chino dormimos en el Hotel Rheinbrücke*** en Baden-Württemberg.

Reemprendimos la marcha por sinuosas carreteras para ir descubriendo Selva Negra con sus espesos bosques y sus pueblecitos con casitas de madera, al mediodía nos paramos a comer en lo alto del Felbergpass 1233 m. en un restaurante típico motero, después de reponer fuerzas nos dirigimos a Falkau.


No muy lejos de allí se encontraba El Schluchsee, que es el lago más grande de la mágica Selva Negra, y es famoso sobre todo por sus extraordinarias posibilidades para practicar deportes náuticos, con sus siete kilómetros de largo y 1,4 kilómetros de ancho; pese a no ser un lago natural nos pareció de una extraordinaria belleza.

Regresamos a Falkau donde nos hospedamos en una casa “zimer”, que quiere decir que tienen habitaciones para huéspedes y comparten la casa con ellos, fue una suerte encontrarla, la familia era muy acogedora y amable, nos prepararon una cena buenísima.

Al día siguiente nos pusimos en marcha a las 9:30, un sueño reparador nos había dejado nuevos, y un buen desayuno hizo que los kilómetros del día anterior fueran ya sólo un recuerdo.

El abuelo de la casa, se ve que en su día fue un gran aficionado a la caza, buena prueba de ello es la gran cantidad de piezas que se exibian en el comedor de la casa, eso despertó nuestra curiosidad y en especial la de Damián que también comparte esa afición.

Nos despedimos de Selva Negra, por carreteras reviradas y desfiladeros, pasando por Freiburg (capital de La Selva Negra), dejamos Alemania para entrar en Francia, cruzando la frontera sobre el río Rin y atravesamos la campiña Francesa, paramos a dormir a la altura de Feurs.

A la mañana siguiente amaneció nublado y circulamos todo el día con lluvia aunque eso no nos impidió rodar a buen ritmo en dirección a Bordeaux, seguimos bajando hasta entrar en España por Bayona.

Nos dirigimos a Hondarribia (pueblo situado más al norte de España), nos hospedamos en el Hotel Palacete*, que está situado en la Plaza de Gipuzkoa (también conocida como Plaza de las Cadenas), en el corazón del casco histórico, donde estuvimos como reyes, ya por la noche pudimos dar buena cuenta de los típicos pinxos y el chacolí.

Nos levantamos nuevamente con lluvia y dedicamos el día a hacer turismo a pie, y paseamos por el puerto deportivo, admirando con curiosidad sus pantalanes adaptados para soportar las mareas que se dan en el Mar Cantábrico.

Y seguimos hasta el puerto pesquero donde iban llegando barcos durante toda la mañana, pero no tuvimos la suerte de coincidir con la descarga de alguno. También pudimos admirar el parador de turismo de Hondarribia que asoma sobre la bahía de Txingudi, que separa España de Francia.


Después de un día sin moto, volvimos a coger nuestras máquinas, y tomamos la N-634 en dirección a Zumaia, pasando por Zarautz y Getaria, al islote que se ve al fondo se lo conoce como "el ratón de Getaria" el motivo és obvio, esta carretera discurre todo el trayecto por la costa y las vistas son muy atractivas; nos la habían recomendado y fue todo un acierto.

Ya en Zumaia al preguntarles, la ertzaintza nos condujo amablemente hasta la ermita de San Pedro, situada en lo alto de los acantilados, fue un detalle bastante gracioso. La panorámica sobre el acantilado era especialmente hermosa.

Después de comer en Zumaia iniciamos tranquilamente el camino de regreso a casa, parando para pasar una noche en Tudela y otra en Lérida, hasta llegar a Barcelona y coger el barco hasta Menorca.
En éstos diez días y después de 4.112 Kilómetros hemos acumulado experiencias inolvidables, que nos han hecho sentir las emociones más intensas de nuestras vidas, lo que un día parecían sueños imposibles han pasado a ser una realidad, ya podemos volver a soñar.
DAMIÁN, ABEL, ARTURO Y SEDES.